Es
más que un secreto a voces, Cesc Fábregas volverá al lugar donde
triunfó, volverá a Londres. Pero esta vez no vestirá de rojo, sino
de azul.
El
español se pondrá a las ordenes de José Mourinho, que está
montando un equipo para competir en la Champions.
El
Chelsea pagará 33 millones al Barcelona para que el catalán vista
de “blue”. Además quieren que el fichajes se cierre antes del
comienzo del Mundial.